El director del Centro de Humor de Irán, Abbas Hosseinnejad, participó en la 20a Feria Internacional del Libro de Venezuela (Filven) con el conversatorio “El arte del humor iraní”, un recurso que es usado en su país “como una estrategia para crear unión entre las personas y resolver conflictos”.
Hosseinnejad explicó el significado del humor para los iraníes, y cómo a través de ese recurso y de las bromas se puede hacer reír y sonreír a las personas, actitud contraria a los insultos y a las tonterías. “Nosotros tenemos un libro de hace 600 años que habla sobre el humor como una forma de poesía”, explicó.
A través del humor se puede alabar a las personas y, del mismo modo, transmitir información que normalmente no se podría hacer por otras vías o no sería bien vista.
Abbas Hosseinnejad precisó que en su país tienen institutos dedicados a enseñar el arte del humor. Cada día hay más personas inscribiéndose en estos cursos.
En ese sentido, dijo que como medida gubernamental se están expandiendo estas academias en el país, no solo en Teherán, la capital. Incluso, los libros más comprados por los iraníes son los de comedia, comentó.
Además, los medios gubernamentales transmiten programas bajo formatos como stand up comedy. En el caso de la televisión, también se cuenta con canales y programas dedicados al humor.
Sobre los puntos de coincidencia entre el humor venezolano y el iraní, explicó que en ambos países se tiene la costumbre de bromear sobre las adversidades, que normalmente se convierten en bromas para reírse y sobrellevar la situación.
Hosseinnejad reflexionó sobre el poder terapéutico de la risa y del privilegio que significa regalar una sonrisa: reírse es fácil, gratis y genera bienestar. No obstante, aclara que se debe tener muy en cuenta la responsabilidad que ello implica, preguntarse primero qué puede resultar gracioso y qué no.
“Quien hace reír a las personas tiene un gran poder porque puede darle calma (…) Si yo puedo hacer reír a alguien eso será suficiente en mi vida”.
Este conversatorio es solo una de las más de 600 actividades programadas en la Filven 2024, que permanecerá abierta al público hasta el domingo 21 de julio en la Galería de Arte Nacional. Su programación puede ser consultada en el portal web www.filven.com.
El gobierno de la Federación de Rusia promueve y respalda con políticas nacionales la preservación de las diversas lenguas étnicas de sus pueblos, experiencia que se abordó en la 20ª Feria Internacional del Libro de Venezuela (Filven) 2024.
“Rusia no solo es un país grande, sino rico en diferentes culturas. Siempre hemos sido muy cuidadosos con la cultura de cualquier pueblo: utilizamos políticas o programas específicos para que estas culturas puedan seguir floreciendo y ser apreciadas por las venideras generaciones”, comentó el embajador ruso en Caracas, Sergey Mélik – Bagdasárov, acompañado por la agregada para la Educación y Cultura del país euroasiático, Alexandra Abramova.
El diplomático, quien agradeció al gobierno venezolano por instalar plataformas de intercambio cultural y de aprendizaje, detalló que Moscú cuenta con normas establecidas en su Constitución y en la Ley Federal de las Minorías Indígenas, para incluir a los diferentes sectores en la toma de decisiones sobre sus territorios.
En ese sentido, mencionó la presencia de unas 193 etnias y más de 100 lenguas escritas, además del ruso. “La preservación y promoción de las lenguas de la cultura étnica y sus derechos es una prioridad fundamental”, agregó Sergey Mélik – Bagdasárov, quien instó a rechazar cualquier acto de discriminación étnica.
La sala Ifigenia, donde se desarrolló el conversatorio, se llenó con un público interesado por conocer más de la cultura y la literatura de los pueblos rusos. En este espacio de la feria también se instaló una exposición fotográfica sobre los trajes típicos de los pueblos de la nación euroasiática.
En la actividad también se obsequió el poemario “Rosario de mis días”, de Rasul Gamzátov, traducido por primera vez al español por Rubén Darío Flórez.
Además de promover el intercambio con pueblos hermanos, la 20ª Filven ofrece más de 600 actividades entre foros, conversatorios y coloquios. La feria cerrará el próximo 21 de julio en la Galería de Arte Nacional, en Caracas.
Poetas de Venezuela, Colombia y Argentina unieron sus delicados versos para mostrar su solidaridad con Palestina, población que desde el 7 de octubre de 2023 es víctima de un genocidio por parte del Gobierno de Israel, con la complicidad de Estados Unidos y buena parte de la comunidad occidental.
La moderadora del evento, Stefany Rojas, recordó que la población palestina es una comunidad inocente que sufre la desaparición de su memoria y la ocupación de sus territorios ancestrales, es amedrentada con armas cargadas de odio y vive en constante zozobra y estado de miedo.
La poeta, periodista y activista política Hindu Anderi expresó que Palestina no es un conflicto, ni un reservorio de guerra. “Es una herida abierta del mundo”, destacó, para hacer énfasis en la vulnerabilidad que arropa a esta nación.
Para la activista de la Plataforma de Solidaridad con la Causa Palestina, la extinción de la población palestina sugiere una gran amenaza para la humanidad, pues es una “derrota de la paz y de la cultura”.
Con signos de melancolía en su rostro, Anderi teme imaginar la gran cantidad de palabras, oraciones e imágenes hermosas que han sido masacradas por Israel, tantos o más que los sueños de decenas de miles de hombres, mujeres y niños palestinos sepultados por el régimen sionista.
La periodista recordó la desaparición de más de mil familias, acciones propias del terrorismo, del fascismo y del sionismo. “Quieren disfrazarlo (el genocidio) con palabras como libertad y democracia”, enfatizó.
Gallardía de una comunidad oprimida
Anderi compartió con el público un recital poético que hace referencia a la crítica situación que padece la población de Palestina, donde mujeres, hombres y jóvenes se ven sometidos sin piedad por grupos sionistas.
Los poetas Fred Yazzed y Lautaro Rivara, de Colombia; Freddy Ñáñez y Juan Calzadilla, de Venezuela; y Leandro Frígoli, de Argentina, compartieron con los presentes versos poéticos que exaltan la valentía de un pueblo palestino que se mantiene en constante lucha por la defensa de sus tierras y de su integridad.
Frígoli, comunicador social, agradeció a la editorial Abisinia por sus textos sobre Palestina, una acción que calificó como “un grito libertario que denuncia actos de injusticia”. A su vez, afirmó que la poesía es un elemento sagrado que debe impulsarse para consagrar la libertad de un territorio.
En tanto, el poeta, cronista y periodista Lautaro Rivara aseveró que este encuentro se propicia debido a que aún se mantienen los ataques sobre Palestina, acciones que deben denunciarse, una y otra vez, a través de distintos movimientos sociales y actividades que llamen a la reflexión y al entendimiento de la causa palestina.
Mientras, el poeta y escritor colombiano Fredy Yezzed sostuvo que “la palabra dura más en el tiempo que todas las armas genocidas que pretenden adueñarse de una población que solo desea la paz”. Asimismo, agradeció al público presente por interesarse y preocuparse por conocer y debatir sobre la tragedia del pueblo palestino.
Otros poetas presentes también agradecieron la asistencia a este encuentro que permitió alzar la voz por quienes no pueden hacerlo por miedo y que viven día tras día sometidos a condiciones infrahumanas por parte de un régimen sionista.
“La huella de la identidad: Una perspectiva africana de los derechos humanos”, fue el nombre del conversatorio que mostró parte de la perspectiva de la República de Sudáfrica sobre los derechos humanos y las huellas de su identidad histórica.
La actividad tuvo lugar en la 20ª Feria Internacional del Libro de Venezuela 2024 y estuvo encabezada por Shubnum Khan, Terry- Ann Adams y Gilbert Motsaathebe. Los escritores integran la delegación sudafricana invitada especialmente a la Filven. Antes de iniciar sus ponencias, agradecieron la solidaridad del Gobierno de Venezuela con las luchas de su país.
“Los libros tienen un peso importante en la humanidad. Podemos conocer sobre problemas alrededor del mundo, ver y aprender que aunque vivimos en países diferentes, compartimos muchas veces la naturaleza de los problemas”, precisó Terry-Ann Adams.
En tanto, Gilbert Motsaathebe honró la memoria de los fallecidos en la masacre de Soweto (Johannesburgo, 1976), quienes luchaban contra la segregación racial. Por ello, cada 16 de junio, Sudáfrica celebra el Día de la Juventud, para promocionar la igualdad y el respeto de los derechos humanos de cada persona a la autodeterminación, así como también para conmemorar esa masacre.
Al mismo tiempo, instaron a los presentes a guardar respeto por todos los personajes importantes de la historia. También hicieron un llamado a solidarizarse con los pueblos de Palestina y del Congo, para que puedan superar las crisis humanitarias que padecen actualmente.
Igualmente, hablaron sobre la historia de la nación africana en su lucha contra la discriminación racial y la violación de sus derechos humanos, principalmente a causa de la brutalidad policial. En ese momento, recordaron al líder sudafricano y símbolo de la lucha contra el apartheid, Nelson Mandela (1918-2013), quien esta semana habría arribado a 106 años.
Finalmente, los escritores sudafricanos coincidieron en la importancia de los libros, de la lectura y del arte para unir a los pueblos del mundo, y que juntos alcen la voz como activistas y defensores de las distintas luchas que afrontan.
El Observatorio Venezolano Antibloqueo presentó en la 20ª Feria Internacional del Libro de Venezuela (Filven) la serie Resistencia Comunal, que busca darle voz a las comunas venezolanas, organizaciones del Poder Popular que mantienen vivo el legado del comandante Hugo Chávez en la construcción del futuro de nuestro país.
El viceministro de Políticas Antibloqueo, William Castillo, compartió los avances en el desarrollo de una línea editorial con más de tres años de experiencia, dirigida a investigar y registrar el fenómeno del bloqueo en Venezuela, desde una perspectiva de trabajo documental y de orientación humana.
Uno de los ejes más relevantes de este proyecto lo impulsan Cira Pascual y Chris Gilbert, profesores de la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV), quienes sistemáticamente han estado recorriendo el país “conversando y conociendo las comunas, de la mano de nuestra base social, con el pueblo, y recogiendo de su voz la experiencia sobre cómo han enfrentado los impactos del bloqueo”, señaló el viceministro.
De acuerdo con Castillo, la serie puede llegar a 10 títulos, pues hay muchas comunas que están trabajando y generando “procesos de resistencia y de reflexión política como formas organizativas, basadas en la idea de la construcción popular para hacer frente a las sanciones criminales”.
Celebró, además, la iniciativa de estas instancias populares para generar redes de producción y organización, que han permitido a las comunidad afrontar el bloqueo.
Alternativa socialista, popular y soberana
Cira Pascual, impulsora de la serie Resistencia Comunal, detalló que la obra recoge las voces de actores como las comunas de Apure. “Es un trabajo que venimos haciendo como proyecto, es un trabajo testimonial. Son los obreros y obreras los que relatan cómo han sido afectados por el bloqueo imperialista. Pero lo que venimos aprendiendo es que los venezolanos y venezolanas están construyendo una alternativa y no se interpretan como víctimas, se interpretan como sujetos de transformación”.
Por esa razón, la también cofundadora del programa “Escuela de Cuadros” y profesora de la UBV añadió que este trabajo va dirigido a “los compañeros y compañeras que construyen una alternativa socialista, popular, democrática y soberana en un contexto realmente difícil, debido a todo el bloqueo, a las sanciones, a las medidas coercitivas unilaterales”.
Por su parte, Chris Gilbert destacó el trabajo realizado con la comunidad indígena. “Me parece interesante que intenten adaptarse a la modernidad existente pero de forma crítica; ellos no rechazan la tecnología, más bien quieren usarla de manera consciente y racional.”
Gilbert celebró que en cientos de lugares de nuestro país “haya un montón de venezolanos construyendo y visualizando una vida mejor anclada al poder colectivo, a la solidaridad desprendida del egoísmo”.
La serie Resistencia Comunal puede descargarse en forma digital, para seguir apoyando las iniciativas desarrolladas en Venezuela que, a pesar de las amenazas tan profundas y tan crueles, ha demostrado que sin la participación protagónica del pueblo organizado el éxito no es posible. El título está disponible, junto a otras publicaciones del observatorio, en https://observatorio.gob.ve/
La Asociación Nacional de Autores Cinematográficos de Venezuela (ANAC) realizó este viernes un homenaje “in memoriam” a la cineasta, documentalista, fotógrafa y destacada promotora cultural venezolana Margot Benacerraf, considerada una de las pioneras del cine nacional y latinoamericano.
En el marco de la 20ª Feria Internacional del Libro de Venezuela (Filven), el presidente de la ANAC, Édgar Narváez, explicó que aprovecharon esta fiesta literaria para realizar varias actividades por la celebración de los 50 años de su fundación. Precisamente, una de ellas fue el reconocimiento a Benacerraf y a su obra “Araya” (1959), una de las primeras producciones cinematográficas venezolanas que recibió reconocimiento internacional en el Festival de Cannes. Incluso, aún se considera uno de los mejores documentales latinoamericanos de todos los tiempos.
Además de proyectar el filme, también conversaron y analizaron la obra de esta autora, quien durante su carrera profesional también destacó con otro documental, “Reverón” (1952), y fue la fundadora de la Cinemateca Nacional (1966).
En este sentido, Manuel Suárez Reverón, analista cinematográfico, destacó el doble legado de Margot, ya que también “deja una obra importante como su vida, el impacto que tuvo en el mundo, las relaciones que generó a partir de su talento y de sus conocimientos, con figuras de talla mundial que quisieron relacionarse con ella por su genialidad”.
Además, “deja obras audiovisuales de gran potencia para seguir diciéndonos cosas hoy, como Reverón y Araya, que siguen siendo dignas de estudio, análisis y comprensión, en términos de lenguaje cinematográfico; también de perfeccionamiento estético, de cómo construir un discurso audiovisual de alta factura y de alto contenido que trascienda las fronteras venezolanas”, puntualizó el también investigador.
La ANAC es una asociación de profesionales del cine que agrupa a directores, guionistas, fotógrafos y músicos. En la Filven homenajearon a varios artistas nacionales, como el escritor y cineasta Edmundo Araya, quien murió en Mérida en junio de 2019, a los 83 años de edad; al director de cine y televisión César Bolívar, quien falleció en mayo pasado a los 79 años; y a Benacerraf, quien se despidió también en mayo reciente a los 97 años.
En materia formativa, la ANAC realizó durante esta Filven un conversatorio sobre escritura de guiones y otro sobre derecho de autor en la era digital, de acuerdo con lo informado por su presidente, Édgar Narváez.
El homenaje a una de las figuras más relevantes del cine nacional forma parte de la agenda de la Filven 2024, que cerrará este domingo 21 de julio en la Galería de Arte Nacional, en Caracas.
La 20ª Feria Internacional del Libro de Venezuela 2024 se consolida como un espacio vital para el florecimiento de nuevas narrativas venezolanas. Esto quedó en evidencia durante la presentación de “El último romántico”, la más reciente obra del filósofo y comunicador social Miguel Ángel Pérez Pirela. En un contexto donde la narrativa venezolana experimenta un resurgimiento, la Filven es un espacio indispensable para el intercambio de ideas y la visibilización de nuevas propuestas literarias.
En la presentación, el destacado intelectual Luis Britto García elogió la obra de Pérez Pirela, resaltando su capacidad para crear “lecturas absolutamente deliciosas” que transmiten “desorden, alborozo y alboroto”. Destacó que los textos poseen un ritmo y una musicalidad que cautivan e invitan al lector a moverse al compás de sus palabras, en una auténtica danza literaria.
Por su parte, Pérez Pirela enfatizó la importancia de su obra en el contexto de la nueva generación de escritores venezolanos: “Es una propuesta literaria para esta nueva generación de venezolanos y venezolanas que queremos escribir desde lo alternativo, lo reivindicativo y lo revolucionario, pero que no queremos hacer una novela política”, expresó.
El filósofo describió su nueva novela como “un libro irreverente, duro y salvaje”, que se aleja de sus obras anteriores, “Happy” y “Pueblo”, para adentrarse en una propuesta literaria renovadora y reivindicativa. Explicó que “El último romántico” es una novela del “antiamor”, que indaga en las contradicciones y complejidades de las relaciones amorosas y ofrece una valiosa perspectiva historiográfica sobre la Cuarta República venezolana (1958-1998), reflejando las grandes contradicciones de ese período.
El evento también sirvió como espacio para reflexionar sobre el estado actual de la narrativa venezolana. El viceministro de Fomento para la Economía Cultural y presidente del Centro Nacional del Libro, Raúl Cazal, expresó: “Me alegra muchísimo la publicación de ‘El último romántico’ por una razón, y es que la narrativa en Venezuela ha sido vigorizada por el trabajo de instituciones como Monte Ávila Editores, Fundarte, los premios Stefanía Mosca, las bienales y muchas publicaciones que han logrado levantar nuestra narrativa”.
Finalmente, Pérez Pirela agradeció el apoyo del Ministerio del Poder Popular para la Cultura, porque fue con su apoyo que se hizo posible la presentación de este libro en el marco de la Filven 2024.
En resumen, “El último romántico” se perfila como una obra que cautivará a los amantes de la literatura venezolana contemporánea, gracias a su estilo audaz, su profundidad filosófica y su capacidad para retratar las complejidades del amor y la sociedad. No te pierdas la oportunidad de conocer esta nueva joya de la pluma de Miguel Ángel Pérez Pirela.
La Biblioteca Ayacucho, homenajeada por sus 50 años en la 20ª Feria Internacional del Libro de Venezuela (Filven) 2024, presentó su libro “Cuentos Fantásticos (1850-1930)”, una antología realizada por Carlos Sandoval para promover la lectura de la literatura fantástica del siglo XIX, en la cual lo sobrenatural es la protagonista.
La obra tiene la finalidad de dar a conocer una parte de la literatura fantástica latinoamericana, con la selección hecha desde la mirada crítica de Sandoval, explicó el presidente de la Biblioteca Ayacucho, Luis Alberto Crespo, quien estuvo acompañado por Jorge Romero, jefe de edición, y Moisés Seijas, quien realizó la cronología del libro.
Crespo, además, agradeció la celebración de los 50 años de la fundación de la Biblioteca Ayacucho, narrando parte de su historia y su labor de promover la lectura.
La casa editora, fundada el 10 de septiembre de 1974, nació por iniciativa del escritor y crítico Ángel Rama y el poeta José Ramón Medina. En cinco décadas ha avanzado “con el apoyo, con la participación de intelectuales venezolanos y latinoamericanos, con su objetivo de dar a conocer lo más representativo, lo más eterno del pensamiento imaginario de Latinoamérica y el Caribe”, detalló.
Por su parte, Moisés Seijas, responsable de la cronología del libro, compartió su experiencia y orgullo por formar parte de la Biblioteca Ayacucho, al realizar un trabajo con compromiso y responsabilidad.
“Y ahora nosotros formamos parte de una fracción de esa historia, que es la historia de Biblioteca Ayacucho, que al mismo tiempo es, de alguna forma, la historia de la cultura latinoamericana y de la integración latinoamericana”, precisó.
Igualmente, el jefe de edición, Jorge Romero, reiteró el gran significado de la Biblioteca Ayacucho dentro y fuera de América Latina. Además, aseveró que son obras de calidad y de fácil acceso.
Además de Biblioteca Ayacucho, esta edición de la Filven honra a Benito Yrady, como escritor homenajeado; al centenario de Ifigenia, de Teresa de la Parra, y a la revista Tricolor, por sus 75 años de trayectoria. Sudáfrica es el país invitado de honor del mayor evento literario de Venezuela, que terminará este 21 de julio.
El podio de 20ª Feria Internacional del Libro de Venezuela (Filven) recibió a Cósimo Mandrilo, Raúl Cazal y a Tarek William Saab para conversar junto al autor homenajeado del evento, Benito Yrady, acerca de su novela más reciente “La historia del señor Cody”.
“Qué mayor novedad que ‘La historia del señor Cody’, 208 páginas publicada por Monte Ávila Editores. Recién salido del horno, aún se puede sentir el calor”, señaló Cazal, viceministro para el Fomento de la Economía Cultural y presidente del Centro Nacional del Libro (Cenal).
Cazal describe a la novela como una obra de ficción basada en la realidad “que retrata el camino de búsqueda de su autor”. “Benito aborda la historia de Venezuela sin nombrarla, en una narración que no nos permite distinguir los límites de cuánto hay de ficción y realidad en todo el relato”, agregó.
Influenciado por el estilo narrativo de Antón Chejov, “Benito parece no decir nada, hasta que terminas la novela y te das cuenta que lo ha dicho todo”, expresó el presidente del Cenal.
Por su parte, Cósimo Mandrilo, catedrático de Lengua y Literatura, precisó que la obra de Yrady se encuentra transversalizada por “el imaginario del petróleo”. Sin embargo, “La historia del señor Cody” ofrece un nuevo aporte. “Perfecciona en mucho lo que Benito había logrado en ‘Zona de tolerancia’”, reflexionó el académico.
El autor “elimina al narrador en tercera persona característico de toda su obra y pone a un extranjero en la voz del narrador”, detalla Mandrilo. “En este sentido esta obra también es un tributo al ‘Ulises’, de James Joyce, ya que ‘El señor Cody’ es un chorro imparable de historias hiladas de manera tal que en ningún momento pierden unidad”, destacó el catedrático.
El fiscal General de la República, Tarek William Saab, colgó su traje y se desató la corbata para acompañar a su amigo y paisano, Benito Yrady, quien además fue su ejemplo temprano para comenzar a escribir.
La voz del poeta y fiscal, que años atrás dirigió las riendas de la Defensoría del Pueblo, narró la epopeya de la vida “en un pueblo apartado de la provincia que tiene el privilegio de ser una importante ciudad petrolera del país”. “Esa es la realidad que retrata el imaginario narrativo que ha desarrollado Benito Yriady”, destacó el poeta.
El homenajeado de esta edición de la Filven agradeció a Saab por recordarle aquellos años en El Tigre, estado Anzoátegui. “Yo no lo voy a negar, El Tigre fue mi fuente de inspiración para escribir toda mi obra, que tiene que ver con el petróleo”.
“Yo empecé a trabajar en talleres gráficos, manejando una máquina rotuladora. Yo empecé a entender las letras desde los talleres gráficos. Antes los periódicos se hacían línea a línea con plomo”, relató.
No hay espacio en esta página ni memoria de teléfono que cargue toda la experiencia que se vive en esta 20ª Filven 2024. La alegría de esta celebración continúa en los espacios de la Galería de Arte Nacional hasta el domingo 21 de julio, antes de que la fiesta literaria comience su recorrido itinerante por el resto del país. La invitación es a asistir y participar de esta maravillosa aventura, porque “Leer transforma”.
Prensa MPPC (19/07/2024).- Desde el corazón de la 20ª Feria Internacional del Libro de Venezuela (Filven), Ernesto Villegas Poljak, figura polifacética que conjuga en su ser al periodista, al escritor y al ministro, presentó su novela “Maja mía”. La obra surgió de las entrañas de la memoria y el amor filial, fruto de un año entero de escritura robada a las madrugadas.
Este libro, el quinto publicado por Villegas, es un canto a la resiliencia, un homenaje a las raíces que se niegan a ser arrancadas por los vientos de la historia. El autor lo describe como un esfuerzo de reconstrucción histórica sobre la vida de su madre, Maja Poljak, escrito con ocasión de los 100 años de su nacimiento.
En la Sala Filven se reunieron Cósimo Mandrillo, narrador y autor ganador de la VII Bienal Nacional de Literatura Gustavo Pereira; la periodista y directora editorial Klara Aguilar, el dramaturgo Pablo García Gámez y el autor, Ernesto Villegas, ministro del Poder Popular para la Cultura.
Al hablar de “Maja Mía”, Mandrilo alabó que más allá del relato familiar, la obra enriquece el panorama del lector en su tratamiento de los hechos históricos y del contexto social que envuelve a sus personajes, producto de una intensa investigación.
“Lo familiar es el hilo conductor del relato, pero a medida que va contando las peripecias de su familia, el traslado de un país a otro y las persecuciones, va tejiendo un bagaje de conocimiento y de información con respecto a lo que acontecía en el contexto mundial. De esa manera, el libro deja de ser simplemente una crónica familiar”, expresó Mandrillo.
También aplaudió el análisis que ofrece sobre la situación en Venezuela. “No es la información escueta de un historiador, es información vista a través de los ojos de una persona que vivió acuciosamente esa realidad, analíticamente a través de lo que escribe y del tipo de lucha que libraba Maja Poljak”, expresó.
Un personaje fantástico
García Gámez recordó con gran afecto a “la señora Maja”, como solía llamarle desde que la conoció siendo niño, cuando trabajaba con su madre. En la obra, la describe como “un personaje fantástico”, de una militancia muy arraigada y que hacía todo en función del bien social.
“Es una mujer que enfrentó a la sociedad de su momento, que llegó a Venezuela aprendiendo el idioma y al poco tiempo escribía en periódicos. Una mujer que intuye lo que 30 o 40 años después llamamos feminismo, esa desigualdad que hay en la sociedad a partir de los géneros”, expresó García Gámez, rescatando esta obra como un saldo a favor de la memoria histórica y la lucha personal.
Con la pluma como brújula y el corazón como mapa, Villegas Poljak guía al lector por los laberintos del siglo XX a través de los ojos de Maja, su madre, quien como un Ulises moderno atravesó océanos de incertidumbre huyendo de la sombra nazi que azotó a Europa a finales de los años 40, para finalmente anclar su destino en las cálidas costas venezolanas.
En su intervención, Villegas agradeció la presencia de familiares y amigos entrañables, y la oportunidad de poder compartir sobre la vida de su madre. “Sus decisiones permitieron que estemos nosotros aquí con ustedes, porque ninguno de estos Villegas aquí presentes seríamos los mismos. Todo ha sido posible gracias a ella, el mejor legado fue su unión con el negro Cruz Villegas”.
No, en el nombre de Maja
Como autor, leyó un fragmento de la dedicatoria de su obra: “A las niñas y niños víctimas del holocausto europeo, de la conquista y colonización de América y África, del genocidio en curso en Palestina”. Además, recordó una expresión entre judíos y descendientes de judíos opuestos al genocidio en Palestina: “No en nuestro nombre”, y agregó el ministro: “y yo diría no, en el nombre de Maja”.
“Maja mía” trasciende lo individual para convertirse en un testimonio universal de resistencia y esperanza. En sus páginas, gestadas en los intersticios entre el deber público y la pasión privada, se reivindica la personalidad de una increíble mujer. Maja emerge de estas páginas, no como un apéndice de la historia de otros, sino como protagonista de su propia odisea. Periodista, militante, revolucionaria; cada faceta de su ser brilla con luz propia, desafiando los estereotipos y las simplificaciones.
La obra, publicada bajo el sello “Nosotros mismos”, es un acto de amor filial y un ejercicio de justicia histórica. Es un recordatorio de que nuestras vivencias son hilos en el gran tapiz de la historia universal, y que cada vida, por aparentemente pequeña que sea, contiene en sí misma la semilla de lo extraordinario.
En la Filven, entre estantes repletos de mundos por descubrir, “Maja mía” se alza como un faro, invitándonos a explorar la vida de una mujer excepcional y también los recovecos de nuestra propia humanidad.